Se supone que el proyecto de recuperación/descontaminación se redactará tras una (o más) fases de investigación, en las que se habrán identificado superaciones de valores NGR de suelo (o similares: VIEs Vascos, IVs Holandeses) o IVs holandeses (o Valones, etc.) de aguas subterráneas, y que la necesidad de recuperación vendrá deterinada por un ACR (Análisis Cuantitativo de Riesgos).
Si el ACR se hubiese realizado de una manera exhaustiva (o se hubiese contratado a alguien que sepa bien de qué va la cosa y los costes que se pueden reducir con un ACR algo más caro y detallado) deberían venir los valores límite aceptables en la recuperación (mediante metodología de ACR pueden haberse propuesto límites mayores a los normativos, los cuales no hay que olvidar se han elaborado en base a la misma metodología).
Si no, pues se pueden proponer los valores normativos (NGRs, VIEs, IVs...).
Sobre los contaminantes a analizar, pues los que hayan superado los valores de referencia.
Sobre cuantas muestras tomar, y cómo y donde tomarlas para verificar la remediación, podrías basarte en lo desarrollado en el DECRETO 199/2006, de 10 de octubre, por el que se establece el sistema de acreditación de entidades de investigación y recuperación de la calidad del suelo y se determina el contenido y alcance de las investigaciones de la calidad del suelo a realizar por dichas entidades", en cuyo Anexo II.D. viene un relativamente desarrollado "Procedimiento para verificar la calidad del suelo remanente".
Y si también hay afecciones a ls aguas subterráneas, ahí si que entra el diseño de piezómetros según las plumas identificadas y las direcciones de flujo según la piezometría. Y, como mínimo, dos muestreos de aguas en toda la red piezométrica en el año siguiente (aguas altas y aguas bajas) para verificar que no se producen elevaciones en las concentraciones y, a ser posible, confirmar que tras la ejecución del proyecto (y eliminación de foco/s primario/s y/o secundario/s) las concentraciones presentan una tendencia descendente.
Si el ACR se hubiese realizado de una manera exhaustiva (o se hubiese contratado a alguien que sepa bien de qué va la cosa y los costes que se pueden reducir con un ACR algo más caro y detallado) deberían venir los valores límite aceptables en la recuperación (mediante metodología de ACR pueden haberse propuesto límites mayores a los normativos, los cuales no hay que olvidar se han elaborado en base a la misma metodología).
Si no, pues se pueden proponer los valores normativos (NGRs, VIEs, IVs...).
Sobre los contaminantes a analizar, pues los que hayan superado los valores de referencia.
Sobre cuantas muestras tomar, y cómo y donde tomarlas para verificar la remediación, podrías basarte en lo desarrollado en el DECRETO 199/2006, de 10 de octubre, por el que se establece el sistema de acreditación de entidades de investigación y recuperación de la calidad del suelo y se determina el contenido y alcance de las investigaciones de la calidad del suelo a realizar por dichas entidades", en cuyo Anexo II.D. viene un relativamente desarrollado "Procedimiento para verificar la calidad del suelo remanente".
Y si también hay afecciones a ls aguas subterráneas, ahí si que entra el diseño de piezómetros según las plumas identificadas y las direcciones de flujo según la piezometría. Y, como mínimo, dos muestreos de aguas en toda la red piezométrica en el año siguiente (aguas altas y aguas bajas) para verificar que no se producen elevaciones en las concentraciones y, a ser posible, confirmar que tras la ejecución del proyecto (y eliminación de foco/s primario/s y/o secundario/s) las concentraciones presentan una tendencia descendente.