julianvalla escribió:Apreciados foreros, echando un vistazo por la web, llegué a esta interesante página, y me dediqué a leer temas diversos del foro. Me presento, me llamo Julián, soy natural de Valladolid, lugar donde trabajo.
Para que sepáis un poco de mi, y el porqué de sacar este tema, os cuento algo sobre mi pasado. Tengo 46 años. Hace "muchos", como podréis suponer, obtuve el título de ingeniería de minas en la UPM. Por aquel entonces, no había que buscar mucho para encontrar trabajo dentro de los ámbitos técnicos de la ingeniería. Era otra época bien diferente. Muy difícil era acceder a una escuela universitaria, sobre todo para la gente que, como yo, no disponía -familiarmente- de recursos económicos, luchando a destajo por cualquier tipo de ayuda estatal. Terminé la carrera, y aunque tenía trabajo, sobre todo en construcciones y montaje industrial (pujante por aquel entonces), decidí irme, con el poco dinero que tenía ahorrado, a "vivir la vida" y reforzar mis conocimientos en lengua inglesa, evadiéndome a Inglaterra (en concreto, Manchester). Estuve allí 9 meses, trabajando en un hotel, logrando definir perfectamente mi nivel de inglés, y fue entonces cuando, buscando empleo, vi una oferta de la petrolera americana Exxon, que requerían ingenieros de prospección para una plataforma off-shore. Ahorrándome intermedios, en tres meses estaba en Estados Unidos, en TX (Tejas), con un contrato recién salido del horno para trabajar no en una plataforma petrolífera, sino para formar parte del Departamento de Producción de una refinería en esa árida y aburrida zona de Tejas. Tenía 27 años. Me costó adaptarme a la vida americana, no pude evitar sentir una profunda morriña de Valladolid, de mi familia, de mis amigos. A ello, se unió el hecho de que mi padre se estaba muriendo prematuramente, y tuve un ligero episodio represivo. Me refugié en el trabajo. Cuando eso sucede, todas las energías y capacidad cognitiva se centran en desarrollarse profesionalmente, con su parte buena...pero también se dejan de lado vivencias interesantes, conocer sitios, conocer gente fuera del trabajo. Vivía por y para el trabajo. Más o menos, el tópico clásico americano.
El sueldo...supongo que muchos tendréis curiosidad. Se trataba y se trata de la primera petrolera mundial. No escatiman en dinero. Te explotan, te revientan, pero ponen el dinero que sea encima de la mesa, sobre todo cuando más o menos ya estás formado (hay mucha rivalidad entre petroleras, existen "fichajes" millonarios de unas a otras).
Aprendí mucho, en dos años tenía una nómina escalofriante, y me ascendieron con cierta rapidez. Conocí a una chica americana, me casé con 31 años. Viajé mucho, sobre todo a Arabia Saudí, y fue entonces cuando empecé a estudiar árabe, lo cual me revalorizaría aún más como ingeniero, en este mundo del petróleo, donde saber idiomas es condición necesaria para poder ascender y pasar a departamentos en los cuales se mueva el dinero (negociar contratos, transferencia know-how, etc.) a escala internacional.
La cosa iba "viento en popa". La empresa me subvencionó un máster MBA y un curso de especialización ultra-intensivo en oleoductos con expertos mundiales en el MIT. Económicamente tenía una vida sobrada. Pudiendo conmigo la avaricia, monté un pequeño despacho consultivo en Houston (TX), sin dejar el trabajo en Exxon, sobre temas de asesoramiento energético, y empecé a ganar mucho dinero. Por fin veía la luz después de tantos años de estudio, 7 horas al día en una sucia pensión en la Gran Vía madrileña (os puedo asegurar que estudiar una ingeniería por aquel entonces no es tan "liviano" como ahora).
Tuve dos hijos, y al tener hijos ,me di cuenta de que me faltaba algo. Algo tan sencillo como TIEMPO para estar con mi familia. Entrar en una gran empresa a todos nos gusta, ganar mucho dinero también, ser reconocidos también...pero...cuando tienes todo eso...aparece algo muy importante: el tiempo libre. Llegar a puestos importantes en el mundo de la ingeniería enriquece, pero también obliga a estar las 24 horas del día viviendo por y para la empresa (mentalmente, psicológicamente, sobre todo). Cuando de tu firma depende un movimiento tecnológico de cientos de millones de euros, os puedo asegurar que se sueña con ello.
Decidido a dar una vuelta de tuerca a mi vida, decidí volver a España. Dejé Exxon, y transferí mi consultoría a un socio. Regresamos a Valladolid, y una vez allí, al año y medio, saqué unas oposiciones para trabajar como ingeniero facultativo del Estado. Ganaba mucho menos que en EEUU, infinitamente menos, pero era más feliz, tenía tiempo para mi familia, hacía mi vida con total tranquilidad.
No contento con trabajar para el Estado, y teniendo problemas por ciertas envidias surgidas desde mi entorno laboral (me ahorro detalles por prudencia), decidí solicitar una excedencia, y preparar otras oposiciones, en este caso para el Cuerpo de Profesores de Enseñanza Secundaria -a día de hoy-, especialidad en Matemáticas. Muchos os preguntaréis que cómo una persona como yo, con lo que había llegado a tener, acaba en su ciudad natal, y como un sencillo profesor de instituto... Bueno, la vida es así, cualquier trabajo es digno. Yo pude elegir, y elegí.
En la actualidad tengo tiempo libre para estar con mi familia, mis hijos están estudiando duro. Les doy libertad, tienen mi confianza, pero lo que por encima de todo quiero es que sepan muchos idiomas, es lo que verdaderamente enriquece a una persona. Aquí en España... hay un fallo horrible en el sistema educativo, sobre todo desde que entró eso llamado LOGSE, que fue la bomba de dinamita para cargarse la pequeña posibilidad de formar académicamente a personas basándose en el esfuerzo y la superación personal.
Disculpad tanto rollo. He visto gente preocupada por el tema del trabajo, suscribiéndolo también ciertos temas en este foro. Entrevistas de personal...empresas...puestos de empleo...oposiciones... La época actual es muy complicada, y... sí...incluso en las mejores empresas, siempre existe el "enchufismo", de forma muy sibilina (guante blanco). En el campo del petróleo, aquí en España destacan Repsol y Cepsa. Son buenas empresas, pero ciertamente, mi primer consejo es precisamente que tengáis en cuenta que el petróleo no es eterno. Podeís empezar a trabajar en empresas afines al petróleo y enriqueceros profesionalmente, pero sería duro verse con cuarenta y tantos años, pendiente de la desaparición de una empresa y/o regulación de empleo por escasez de crudo (podría extenderme aquí mucho, pero evito el tedio).
El mundo empresarial es muy complejo, pensar realmente qué es lo que queréis en la vida. Pero tener en cuenta, cuanto menos trabajo haya, más terrible será la competencia entre unos y otros. Perfeccionar idiomas, es mi consejo, eso os abrirá todas las puertas. (Particularmente, recomiendo inglés a nivel bilingüe, y alto nivel en francés y alemán; adicionalmente, resultaría positivo tener conocimientos de lenguas de países potencialmente desarrollables, como Rusia y China).
Ánimo,
Julián
Hola muy buenas Julián y demás participantes,
En primer lugar agradecerte por compartir tu experiencia y lo aprendido a través de ella.
Me presento,mi nombre es Yago, acabo de cumplir los 30 años, soy Ingeniero de Minas con formación en eficiencia energética y estoy ante una gran disyuntiva profesional apasionante la verdad, fruto de lo sembrado, pero que me provoca algunas dudas.
En la actualidad a pesar de haber estado tres años en un centro tecnológico con contrato de colaboración, beca y de prácticas investigando sobre temas de eficiencia energética,trabajo como Técnico de procesos gestionando un servicio de limpieza haciendo de todo un poco, como muchos de vosotr@s, supongo.
Ahora bien he seguido apostando por formarme en ese campo que tanto me apasionó y buscando nuevas salidas profesionales más relacionadas con mis estudios; a día de hoy me han venido las siguientes opciones:
-Beca de un año de duración para investigar en temas de aprovechamiento de agua embalsada de minas para calefacción.
- Traslado a Madrid y comenzar en Repsol de prácticas en el área de exploración y producción. Como no tengo mucha experiencia en el sector los primeros años me formarían y luego tendría que viajar bastante a lugares donde se sitúan los pozos de exploración a lo largo de Europa y Sudamérica.
La primera opción la podría compaginar con una reducción de jornada en mi actual trabajo y unirla con una segunda intentona de beca para doctorado. Así mismo los temas personales como pareja y familia no supondrían tantas dificultades. Del mismo modo es una temática que me resulta muy motivadora ya que combina aspectos de mi formación como minero y mi corta experiencia laboral.
La segunda opción aunque se base en un campo bastante alejado con el de la eficiencia y las soluciones energéticas más sostenibles, no deja de ser una oportunidad única de aprender y hacer CV, a parte de trabajar en algo que me gustaría.
Viendo el mensaje de nuestro compañero Julian estoy sumergido en un mar de dudas y así mismo creo que sólo los años te dan esa visión tan global.Ahora bien, me parece muy interesante todo lo que comenta pero adelantarme a los hechos no se hasta que punto es positivo para tomar mi elección. ¿Qué opináis?
Muchas gracias, un saludo y suerte a tod@s.
Yago.