"Carga térmica: la carga térmica asociada a un espacio es el calor que hay que extraer o suministrar para mantener una temperatura y humedad de consigna en dicho espacio, en un determinado instante. La carga térmica es, por tanto, función del tiempo (dependerá de la fecha y la hora considerada). Se obtiene al sumar los efectos de las ganancias o pérdidas instantáneas de energía producidas por las fuentes internas, la irradiación solar, la ventilación, y la transmisión a través de la envolvente del recinto. Tiene dos fracciones:
Carga sensible: es la energía que gana o pierde el aire del recinto en forma de incremento de temperatura.
Carga latente: es la energía que gana el recinto en forma de humedad, al aumentar el contenido en agua del aire. Los aportes de energía latente tienen su origen en la ocupación o en la presencia de equipos determinados que aportan humedad al ambiente, como por ejemplo, una cafetera.
Cargas térmicas máximas: son las máximas cargas de refrigeración y calefacción que se dan a lo largo de todo el año, evaluadas (por defecto) a partir de unas condiciones límite diferentes de las empleadas para la carga térmica (ver Apdo. 3.3). Estas cargas determinan la potencia de los sistemas a instalar.
Potencia de extracción: Es la energía instantánea útil que necesitan los equipos de climatización para combatir la carga térmica. Si los equipos funcionaran al 100% y de forma continua, la potencia de extracción coincidiría con la carga térmica. Sin embargo, la carga térmica está presente en mayor o menor medida durante las 24 horas del día, pero los equipos de climatización sólo funcionan unos periodos de tiempo determinados, marcados por las condiciones operacionales de los recintos a los que abastecen. En las gráficas siguientes aparecen la carga térmica (izquierda) y la potencia de extracción (derecha) para un local en régimen de verano con un horario de funcionamiento de 4 a 12h (hora solar):
Demanda térmica: es el resultado de integrar la potencia de extracción a lo largo de todo el año. Se da en KWh."
Tomado de: http://www.imventa.com/Ayuda/TeKton3D/M ... ermica.htm
Carga sensible: es la energía que gana o pierde el aire del recinto en forma de incremento de temperatura.
Carga latente: es la energía que gana el recinto en forma de humedad, al aumentar el contenido en agua del aire. Los aportes de energía latente tienen su origen en la ocupación o en la presencia de equipos determinados que aportan humedad al ambiente, como por ejemplo, una cafetera.
Cargas térmicas máximas: son las máximas cargas de refrigeración y calefacción que se dan a lo largo de todo el año, evaluadas (por defecto) a partir de unas condiciones límite diferentes de las empleadas para la carga térmica (ver Apdo. 3.3). Estas cargas determinan la potencia de los sistemas a instalar.
Potencia de extracción: Es la energía instantánea útil que necesitan los equipos de climatización para combatir la carga térmica. Si los equipos funcionaran al 100% y de forma continua, la potencia de extracción coincidiría con la carga térmica. Sin embargo, la carga térmica está presente en mayor o menor medida durante las 24 horas del día, pero los equipos de climatización sólo funcionan unos periodos de tiempo determinados, marcados por las condiciones operacionales de los recintos a los que abastecen. En las gráficas siguientes aparecen la carga térmica (izquierda) y la potencia de extracción (derecha) para un local en régimen de verano con un horario de funcionamiento de 4 a 12h (hora solar):
Demanda térmica: es el resultado de integrar la potencia de extracción a lo largo de todo el año. Se da en KWh."
Tomado de: http://www.imventa.com/Ayuda/TeKton3D/M ... ermica.htm