- 14 May 2010, 09:19
#220812
Entre los funcionarios de grupo A (ahora A1) de algún ministerio que yo conozca, existe una cosa que se llama "la bufanda". Consiste en un pago extra al año que se hace en navidades, de ahí su nombre.
Es un ingreso bastante suculento que tienen estos funcionarios. Como no son los más tontos de su barrio, sabrán compensar el porcentaje de bajada salarial impuesto por el señor presidente del gobierno y aquí paz y después gloria, que para eso tienen las mismas responsabilidades que muchos de la privada (si no más) y sus sueldos resultan de risa en relación con muchos de éstos últimos.
Todo el mundo lo sabe, pero no está de más recordarlo: estos funcionarios, aparte de tener una carrera superior, se han tirado de media cinco años atacados para aprobar su oposición, sangrando a sus pobres padres y cuando han querido ganar un duro, sus otros compañeros de promoción ya tenían piso, coche y hasta hijos.
Estos funcionarios se han matado a estudiar perjudicando asuntos y economías familiares para conseguir una estabilidad laboral, al margen de la vocación que sin duda más de uno tiene.
Ahora el Estado español les responde de esta manera y dice que también va a bajar el sueldo de los ministros a los que sólo se les exige para serlo que tengan más de 18 años y, francamente, más de uno es que no aporta nada más.
Pero no sólo los ministros, que son los que hacen que España vaya por un lado o por otro, pueden ser catetos. También están los cargos nombrados a dedo, tirando para abajo está hasta el de "Director General", aunque a éste sí que se le exigen estudios universitarios, pero nada de oposición ni nada de nada.
Ahora viene a cuento la oferta de empleo público que han sacado este año, rebajada en un 90% de plazas con respecto a lo que debería ser. Para estos pobrecillos que se preparen la oposición es "el más difícil todavía". No cabe ninguna duda que ocuparán su puesto verdaderos titanes. Aquí no habrá padrino que les ayude, lo conseguirán por sí mismos. Van a luchar como animales para conseguir su plaza y demostrar que son los mejores. Y sólo para conseguir un sueldo adecuado a su profesión.
Todo lo van a hacer para que a la vuelta de los años, venga alguien al que hicieron presidente del gobierno con una beca y les diga que por encima de sus derechos como trabajadores está el Estado. Les bajarán el sueldo sin más explicaciones y cuando el Estado se recupere y genere riqueza, ni les pagarán compensaciones ni les darán las gracias, como ya ha pasado.
Para evitar confusiones, diré que en mi casa no entra "la bufanda". No obstante, me parecerá muy bien que éste y otros conceptos los manejen los funcionarios para contrarrestar las imposiciones gubernamentales. Imposiciones que no son otra cosa que la aplicación de la ley de Julio César del divide y vencerás.
El gobierno ha sabido jalear a un sector de trabajadores contra el otro sector. Gran parte del primer sector seguramente habrá pensado, se les está bien ¡que se jodan!.
Salud colegas
"las cosas que no ha hecho Dios, llevan la mano de algún ingeniero por algún lado". JCas dixit.
