- 21 Sep 2009, 15:46
#184868
Voy a hacer un símil muy tonto sobre este "juicio".
Una empresa de ingeniería está ofertando y luchando por llevarse una obra frente a otra "empresa compañera".
El jefe de la primera le dice a uno de sus empleados: Ve y sabotea la instalación eléctrica de la otra empresa para que no puedan hacer los estudios para ofertar y, mantén la avería hasta que se acabe el plazo.
El empleado lo hace para "ganar puntos ante su jefe" y sus compañeros presentan la oferta, la competencia no puede hacerlo y la obra se la llevan los saboteadores.
Tiempo después, se le acaba el contrato al empleado saboteador y los jefes deciden no renovarle. El chico mosqueado va y larga lo del sabotaje. Se juzga el asunto en un tribunal normal.
Ahora se acaba la historia, por que de ser como lo planteo yo al empleado se le caería el pelo ya que ha cometido un delito y, contaba con sus plenas facultades mentales, es decir que nadie le ha coaccionado ni tampoco era un retrasado.
Al jefe le caería un puro, pero no tanto como al empleado.
Si el simil lo haces con un atraco el asunto es más grave. Te mando atracar, atracas y yo voy a la cárcel y tú libre.
Nadie querrá fichar a Nelsinho por cenutrio.
La ingeniería es la combinación del arte del copia-pega, con conocimientos básicos de física y mucho ego, pero mucho.
La arquitectura es lo mismo, pero madrugando menos, con plumas de Montblanc y más ego.