Creo que el suelo radiante no ha de ser alimentado por la energía solar por norma. Y el dimensionamiento de los paneles para las dos instalaciones te va a suponer que:
- El presupuesto de paneles solares se dispare pues va a instalar más de los que la normativa -entiendo- te obliga. Ahora que si la propiedad paga...
- Segundo, tendrás que evitar los sobrecalentamientos, o bien derivando parte de ese calor hacia piscinas o desagües o bien tapando los paneles -que como solución la veo de lo más "rupestre"-. El problema de tapar los paneles es que exige una intervención directa de los usuarios.
Es decir, que llegado el caso, estén en la vivienda -que no se hayan ido el día fuera- , se suban a la cubierta (con la dificultad que ello pueda conllevar) y los tapen...
Por lo que no se si puede ser buena idea -desde mi punto de vista- la de sobredimensionar los paneles con el objeto de alimentar la calefacción, pues te puede dar más problemas y te va salir mucho más caro. Ahora bien, soy consciente de que el gran maestro Jordim te sugeriría lo contrario pues está claro que a nivel medioambiental, la opción de los paneles solares prevalece sobre todo.
Ahora bien, si me resulta muy interesante lo que comentas del "suelo radiante frío", ¿cómo funciona? ¿es efectivo realmente?
Un saludo