Desde luego. Yo sólo me he casado con mi responsable. No sé en otros campos, pero desde luego, en el mío si te equivocas en una selección de esas los daños son muy grandes. Y después cuesta muchísimo recuperar el terreno perdido. Yo no trabajo para la automoción, pero creo que todos recordamos el daño que le hizo a Mercedes el fallo en la prueba del alce (valiente animalada de prueba) o a Peugeot el fiasco con los coches que se le apagaban (¿era el 307?).
Siempre está bien probar cosas nuevas, pero los experimentos con gaseosa. En muchas cosas, prefiero dejar la adrenalina a un lado. Quizás estoy sensible por una mala selección hace bastante poco que nos trajo de cabeza por apenas 5 micras de más en holgura en un componente que nos provocaba un pequeño ruido en nuestro producto cuando ya llevaba tiempo funcionando. Ruido que en otros tiempos no habría tenido mayor importancia, pues hay que afinar mucho para oírlo, pero ahora con la crisis todo el mundo mira con una lupa de muchos aumentos lo que compra, y lo que ayer era maravilloso hoy se le ven problemas donde no los hay para poder no pagar o pagar menos.

En parte nos ha venido bien, pues hemos localizado el problema y lo hemos eliminado, pero el coste ha sido grande principalmente en tiempo de investigación para localizar el origen del problema y, sobretodo, ha dejado nuestro sustómetro en niveles tan elevados que no tengo ganas de más gasto adrenalínico. Es curioso como suben las reclamaciones absurdas cuando el dinero escasea. Nos han llegado a pedir garantía por equipos de hace 10 años.
Creo que coincidimos más de lo que pudiera parecer al principio.