jcg43 escribió:JCas escribió:jcg43 escribió:JCas escribió:¿Quieres decir que a partir de ahora todos iguales?
RESERVA ÚNICA de competencias, salvo algunas mínimas exepciones a determinar,
saludo,
¿Todos a hacer de todo, se haya estudiado o no?.
Un ingeniero no es un cualquiera, o sea, persona sin estudios de ingeniería,
Un ingeniero no son todos,
saludo,
No, no son todos. Tú mismo lo has dicho.
Por un lado esta el ingeniero, con sus 5-6 años de carrera. Por otro está el ingeniero técnico, con 3-4. Además, cada uno con sus respectivas especialidades y conocimientos. Cada uno con sus características.
Es la eterna discusión. Todos queremos hacer de todo. Pero para hacer algo hay que estar capacitado. Y la sociedad tiene derecho a saber si esa persona está capacitada para hacer según qué cosas. Si defendemos que todo se aprende en la calle mal vamos. Ya que tenemos tanta capacidad, ¿por qué no coger un bisturí y hacer operaciones a corazón abierto?. Al fin y al cabo, tenemos una asombrosa capacidad de aprendizaje.
Yo soy ingeniero y no me atrevería a hacer muchísimas de las cosas para las que estoy teóricamente capacitado y, sin embargo, otros consideran que por tener un programa cualquiera que se han bajado de internet pueden hacer lo que les venga en gana porque son ingenieros o ingenieros técnicos y para eso les enseñaron a pensar en la Universidad. Pues lo dicho, cojámonos un vademecum y pongámonos a recetar como locos, que para eso somos lo que somos.
¿Y tu cliente? ¿Ese no tiene derecho alguno a estar protegido? A lo mejor tú eres muy legal y sólo haces aquello para lo que estás capacitado, pero hay muchos que no, que son muy valientes y hacen cualquier cosa por un módico precio. Dejemos que hagan más, que es de lo que se trata. Y que el cliente no pueda saber si puede o no puede hacerlo pues hay un sitio donde dice que podemos hacer de todo. Para eso somos profesionales responsables ¿TODOS?
Lo lógico es que se den competencias en función de lo estudiado. Que no haya exclusividades en ninguna actividad si hay otros profesionales preparados para hacer lo mismo.
Puedo entender que a lo largo de una vida laboral se aprenden muchas cosas y no estaría en contra de hacer exámenes para poder ampliar competencias a otras no directamente relacionadas con las de los estudios de cada uno.
Podría entender también que a aquellos que tienen determinados estudios se les reclamasen también pruebas periódicas para mantener o conseguir ciertas competencias. Al fin y al cabo, no es lo mismo el mundo real que el académico y no estaría mal que, adicionalmente a la formación académica, se exigiese una formación laboral para poder ser el que firma un proyecto de un determinado tema.
Entiendo que ya hoy en día que el reparto actual de competencias y atribuciones está completamente desfasado, dejando a ciertas profesiones en posiciones marginadas frente a otras que se les ha dado demasiado (la mía una de las segundas, por cierto) y que eso se debería corregir, pero que eso lleva un gran esfuerzo y complicación y que eso es lo que pretenden quitarse de encima con estos proyectos de ley que están sacando últimamente.
Ahora, con todo lo que entiendo, puedo entender o podría entender, no puedo entender tu planteamiento. Lo de la barra libre me parece un total despropósito y un insulto a la inteligencia. Me parece además un desprecio total hacia el correcto funcionamiento de las cosas y dejar completamente desprotegido al cliente. ¿Qué pasará el día que ocurra una desgracia porque un irresponsable ha decidido hacer algo para lo que no está ni mínimamente capacitado?. Claro, para eso está la ley que le castigará duramente. Perfecto. Y al perjudicado ¿qué? ¿una indemnización otorgada por un seguro que intentará desligarse del irresponsable por ser precisamente eso, un irresponsable? ¿Una indemnización que llegará diez años más tarde pero con el caramelo callamos al damnificado? Pues si el damnificado está muerto, o inválido, o le han fastidiado el negocio que le costó una vida crear va a opinar que vaya mierda de leyes que tenemos. Que vaya dirigentes maravillosos que, en lugar de prever que esto podía pasar, ha preferido trabajar menos y le ha dejado en esa situación.
Si eso es lo que quieres, muy bien, es tu opinión, pero no pretendas que los demás comulguemos con piedras de molino. Tú quieres eso porque te conviene, pero no porque sea para nada correcto.
Y digo esto sabiendo que, precisamente mi profesión, es una de las beneficiadas por esta nueva ley. Sinceramente, me parece un despropósito gran parte de las cosas que nos van a dejar hacer y lo que están diciendo unos y otros al respecto.