Bueno, ahí va una cuestión "pa' nota".
Resulta que en mi casa tengo un poltergeist ...
Situación: Mesa con cristal esmerilado (glaseado lo llamó el de la tienda de muebles). Plantas tu mantel, te pones a cenar y te tomas un rico tinto de verano bien fresquito... retiras el mantel y ¡voilá! aparece la marca del vaso en el vidrio:

En principio no me extrañó... me dije: "bueno, como el vaso está frío habrá condensado humedad y cuando se seque desaparece la marca"... pues-no-padre, la marca al día siguiente seguía exactamente igual... está por la cara
interior del cristal (que es la rugosa) y para quitarla hay que darle con trapo y producto de limpieza (o agua, supongo).
Entonces, yo me pregunto: ¿cuál es la explicación física de ésto?
Nota1: tengo otra mesa muy similar (con un cristal prácticamente idéntico) y en ella no pasa lo mismo... eso sí, es una mesa de mejor calidad (por lo que el vidrio puede que esté hecho translúcido con otra técnica).
Nota2: No ha sido sólo un día, me ha sucedido siempre que he puesto recipientes fríos encima (con mantel; sin mantel no probé). El efecto me ha aparecido tanto con clima exterior invernal (aunque con calefacción en casa puesta a toda mecha) y con el tiempo primaveral que disfrutamos ahora.
Pues hale, especulen, especulen,...
P.D.: He estado buscando por Google y he encontrado alguna cosa que podría arrojar algo de luz al asunto:
http://www.fogonazos.es/2009/07/experim ... seado.htmlLo que cuentan en el enlace podría dar la solución si consideramos que hay una condensación por la cara interna del vídeo pero, sin embargo, la marca debería desaparecer al cabo de un rato cuando se seque y eso no ocurre, la marca queda bien fija y está seca.